La vita é bella

Empieza el juego, quien no haya llegado ya no juega. Se precisan 1000 puntos. El primer clasificado ganará un tanque nuevo. Cuánta suerte. Cada día leeremos la clasificación por ese altavoz de allí, al último clasificado le colgaremos un cartel que dirá: Burro. Aquí en la espalda. Nosotros estamos en el equipo de los súper malos que gritan sin cesar, quien tenga miedo pierde puntos. En tres casos se pierden todos los puntos: los pierden, uno, los que empiezan a llorar, dos, los que quieren ver a su mamá, tres, los que tienen hambre y piden la merienda. ¡Nada de eso! Es muy fácil perder puntos, porque hay hambre. Yo mismo ayer perdí 40 puntos porque no pude aguantar y pedí un pan con mermelada.Y el de frutilla. Y nada de golosinas porque nosotros nos les vamos a dar, nos las comemos todas nosotros. Yo ayer me comí 20. Me duele el estómago. Pero estaban buenas. Se lo aseguro. Perdona que me vaya enseguida pero estamos jugando al escondite y sino me tocara parar.

El agujero

''Me han perforado la frente de un balazo. Aunque no sangro,  siento por el agujero una brisa fresca que me traspasa. Algunos curiosos miran a través de el hacia el otro lado, que se ha puesto oscuro. Muchos sienten envidia de mi situación, pero necesito de inmediato un tarugo para evitar murmuraciones, que, al final, siempre son las que matan.''

El muro

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''Trabajosamente comenzó por levantar un alto paredón a su alrededor para aislarse totalmente del mundo, sin reparar que el verdadero mundo estaba encerrado en él.
Cuando decidió demoler el muro, se le vino encima, matándolo.''